Llega diciembre y llega también el tiempo de Adviento. Esto, para quien no esté muy puesto, es el periodo que abarca los cuatro domingos anteriores a Nochebuena. Época en la que nos prepararemos para la Navidad mediante la reflexión y la oración. Dura entre 22 y 28 días, según la ubicación de la Nochebuena a lo largo de la semana. Con el, se inicia el año litúrgico cristiano cuyo final marca la solemnidad de Cristo Rey, domingo anterior al Adviento.
Encendemos, Señor esta luz
en este primer Domingo de Adviento,
para mantenernos despiertos y en pie,
como centinelas avispados,
ante el Hijo del Hombre que viene,
el Futuro glorioso que nos aguarda,
a despertar nuestra débil y adormilada esperanza.
en este primer Domingo de Adviento,
para mantenernos despiertos y en pie,
como centinelas avispados,
ante el Hijo del Hombre que viene,el Futuro glorioso que nos aguarda,
a despertar nuestra débil y adormilada esperanza.
Despiértanos, Señor,
para avistar a los desesperados de la vida,
para poder ver a los que sólo esperan cosas menores que ellos mismos,
para entrever a los que no tienen
o perdieron la ilusión en Ti
para divisar a los que tienen su futuro cargado de dudas e increencia...
Señor, para que en nuestro entorno seamos testigos claros de tu luz
y motivos creíbles de esperanza.
¡Marana tha, ven, Señor, Jesús!
No hay comentarios:
Publicar un comentario