LA CRUZ, ÁRBOL DE VIDA
Gracias, Jesús, porque en tu cruz nos has redimido. Hoy vamos a poner todas nuestras miserias y pecados en esa cruz bendita: nuestro orgullo en tu cabeza coronada, nuestras codicias en tus manos abiertas, nuestros odios en tu corazón traspasado. Para nosotros es una cruz gloriosa, rebosante de amor. Para ti fue dolor, angustia y abandono. Cargaste con nuestros pecados y en tus heridas fuimos salvados.Gracias, Jesús crucificado y resucitado. Ayúdanos a reconocerte en todas las cruces de nuestra vida; en las cruces de estos últimos días: la cruz de la enfermedad, de la muerte y de la soledad; la cruz de los tristes, los que tienen miedo, los que ven que su futuro es incierto; la cruz de todos nuestros hermanos que sufren. Ayúdanos a ser, como tus primeros discípulos, anunciadores del Reino para llenar al mundo entero de confianza en ti, que nos iluminas con tu luz pascual.
Origen de la fiesta
"Las ordenanzas de la Real Hermandad de la Soledad, de la Vera Cruz y de San Cristóbal del año 1614, conservadas en el Archivo Diocesano de Toledo, nos dicen que el día 2 de mayo se celebraba una procesión desde la Parroquia hasta las afueras del pueblo, a un lugar conocido como la “Cruz del Calvario” en el camino de Fuente el Fresno, con el estandarte de la Santa Vera+Cruz. Se subía después a la ermita de San Cristóbal para el rezo de vísperas, para terminar, tras la adoración del Santísimo en la Parroquia, llevando las insignias de la Cofradía a la ermita de la Virgen de la Soledad. Al día siguiente se celebraba en la ermita de San Cristóbal la fiesta grande de la Hermandad."
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